El principio del placer!????...bueno no, tal vez no.


Bien, omitiendo parte de mi ridículo titulo de un bestseller que con vergüenza he de decir que leí en mis épocas de secundaria, cualquier inicio de algo suele ser un poco complicado porque al fin y al cabo quien sabe bien cómo o por dónde empezar, en ocasiones simplemente empieza, aunque hay algunos que de plano ni llegan a intentar hacerlo.

Perfecto, tome una decisión, después de un par de meses en incertidumbre, fui yo quien dio el primer paso, con mucho riesgo a recibir un batazo, parecía que todo saldría… no bien del todo, pero saldría. El resultado: reaccionaste, al principio.

Que fue lo que te gusto? Saber que “siempre rompo con todo”, que te llamo por tu primer nombre a comparación de todos, que siempre arriesgue que nos pusiéramos en evidencia, los besos que te robaba, el que te mordiera, que nos gustaran las orquídeas, las armas blancas, que interpretara tus señales, o tal vez fue el hacer la historia que llevábamos arrastrando por fin se convirtiera en algo? Que!?.

Que fue lo que te detuvo!? El ver que si respondía, el que fuera a tu encuentro, las bienvenidas, las despedidas, que te tomara de la mano, las miradas, tus salidas, mis tristezas, el mucho o poco tiempo, mis abrazos, el que no supiera usar una Mac, mi intolerancia a la comida grasosa, el que no entendiera sobre tus piedras, nuestras áreas, mis libros, mis letras…yo!? Que!?.

Y te fuiste, me dejaste tu inentendible sonrisa a través de una ventana, no dijiste nada, no respondiste a mis preguntas, y solo me sonreías.

Maldita sea, porque me mataste así en vida?












No tengo titulo, solo un vaso con alcohol.


El mes de mayo está a unos cuantos días por concluir, y no está de más mencionar que de alguna manera el tiempo transcurrido no fue lo que yo pensé que podría ser, es mas siento como si este se hubiera escapado de entre mis dedos.

Si me pongo a hacer el recuento de todo lo que pensé que podría hacer en este tiempo a comparación de lo que en verdad hice, puedo decir que no llegue a cubrir siquiera un 50% de la meta establecida, es más puedo decir inclusive que no puedo siquiera recordar en su totalidad cual era la meta.

He de mencionar que de todo lo que quise que pasara, que intente que pasara, no paso. Parte culpa mía ya sea por falta de organización, salud, dinero o simplemente entusiasmo y ganas. Me deslindo de cualquier otra razón que estuvo fuera de mí. Tuve la oportunidad de realizar diversas actividades, recreativas en su mayoría, con o sin la presencia de alguien a mi lado, pero simplemente no aproveche ello, y es cuando me pregunto. ¿Dónde fui a parar?  

Consecuencia de esta pregunta fue remontarme en lo que yo solía ser antes de ser lo que soy hoy, un costal medio lleno de banalidades mundanas. No es tanto el encumbrar a la melancolía de mi pasado, todo lo contrario, no necesito retomar instantes que ahora no son más que simples recuerdos que tarde o temprano, con el paso de los años, iré olvidando. Solo extraño de mí cierto entusiasmo por la vida, por el conocimiento, por la sencillez que me rodeaba, por el desinterés en mis intereses en las generalidades de la vida. Quien o que se ha comido esa parte de mi, quien de todos esos disque 7 pecados capitales?...pereza?, avaricia?, soberbia?, envidia?; o quizás un poco de todas ellas, sin hacer a un lado el resto.

De nada sirve el marcarse en la piel una meta concluida en la vida, no después de haber escrito todo lo anterior, entonces… de que me sirve haberme retratado un instante de grandeza si a estas fechas tengo el sentimiento de ser un peón más en el tablero.  Un recuerdo tatuado para que, como todos aquellos del pasado, no sea olvidado.

Bueno, no sé, de todo lo que he dicho es muy posible que gran parte sea efecto de mi tercer vaso de whisky (error…segundo, pero bien cargado) aunado a que hace mucho calor y ando en calzoncillos solo con una camisa encima, información que creo yo, está de sobra. Pero las probabilidades de que: uno,  alguien lo lea; dos, le importe. Son casi nulas. Por eso lo escribo.

Y no, no estoy en el mismo humor con el cual algunos ya me han catalogado, simplemente libero una parte de mi con el fin de recordármelo una y otra vez. 
Soy mi propio álbum de instantes tipográficos. 







Pues, hola de nuevo!



De últimas fechas hacia acá, valga la redundancia, me encuentro tan bloqueada creativamente que: Llevo un mes sin terminar mi libro de artista. Tengo un proyecto bloqueado (recuerdo uno, en realidad creo que son un par mas). Mis plumillas están a punto de encontrar su punto de equilibrio metálico y regresar a lo que eran antes…a Fe puro.  

En realidad, para los que solían leerme y para los que inician su lectura en este espacio, nada nuevo desde la última vez que retome este tan pobre y olvidado baúl de letras electrónico, llámese blog.

Francamente, no, no me he dado un tiempo para muchas cosas, entre ellas leer, salir a correr (si, ya soy persona más saludable), ver a mis auténticos y verdaderos amigos que están desde el año “uno conejo”, crecer profesionalmente, pasear, viajar  (mochilazo pues!), dibujar, amar (aunque suene ñoño) e inclusive practicar mi tan gran ultima y nueva inversión llamada caligrafía, además de todo necesito otros aires y más trabajo, creo que materialmente me vuelto más ambiciosa, no sé qué tan bueno sea eso pero bueno, ojala que disminuya al cumplirme tan harto capricho y con el paso del tiempo.

Tuve varios intentos de lo anterior, sin embargo en casi todo, sino es que todo, se ha ido al caño, parece ser que los esfuerzos no son los suficientes… y aun así y con todo también a últimas fechas se me baja la presión y me da taquicardia, será acaso mi dramático final igual al de él hace 12 años!?, digo, porque así empezó todo.

He ahí que a partir de mi último y más reciente “best seller” leído comenzare con un diario (no tan literal) de ciertas reflexiones, la mayoría banales por cierto, pero de algo servirán… supongo.

y si, ya urge un cambio, voy un poco lento, pero voy.